La clave podría estar en comportamientos habituales que te hacen engordar sin que te enteres.
Un reciente estudio ha desvelado que comer mientras caminas, realizas otra actividad sentado, hablas por teléfono, charlas con alguien o ves televisión, no produce sensación de saciedad.
Quienes se distraían con alguna actividad mientras comían solían ingerir más alimentos en las horas posteriores.
Cuando llegue la hora de la comida, date tu tiempo para concentrarte en lo que haces. Tu cerebro debe reconocer tus momentos de comer para enviar las señales pertinentes a tu estómago.
Saborea y agradece los alimentos: en ello podría estar la clave para no subir de peso sin darte cuenta.
#SerFeliz y #Ser Saludable es una decisión de vida… Comienza HOY….
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